Patrimonio

Patrimonio

Dentro de los monumentos de la localidad destaca:

La iglesia de San Pedro, que ejerce de parroquia. Se trata de un sencillo edificio de estilo románico mudéjar del siglo XI, de planta basilical rematada en su cabecera por un ábside. La entrada es gratuíta y puede visitarse a cualquier hora del día.

La espadaña-campanario fue remodelada en los años 1950 En el interior del templo destaca su retablo barroco con una talla central dedicada a San Pedro.

 

 

Así mismo hay otras tallas en las paredes dedicadas a San Blas, patrón de la localidad, Nuestra Señora del Rosario, su patrona, San Isidro Labrador, la Inmaculada Concepción, y una talla de una dolorosa.

En lo alto del monte del mismo nombre que el municipio (888 metros de altura) se encuentra una tórre óptica o telégrafo que fue empleado durante las Guerras Carlistas como sistema de comunicación y, posteriormente en la Guerra Civil Española. La visita es gratuíta y puede realizarse durante todo el día.

Interesante son los caños, antiguos lavaderos situados en los prador, empleados hasta hace no mucho por las gentes del pueblo y que se pudieron realizar en el emplazamiento actual gracias a un curso de agua que hay en la zona y a un manantial.

 

Balsa grande o del palomar, ubicados en los prados, puede contemplarse una balas natural y los restos de un antiguo palomar.

 

Enfrente de los caños, podemos encontrar los restos de otro antigüo artilugio el Potro, que servía para el herraje de caballos y bueyes

 

En tiempos había varias cruces por el entorno del pueblo, de las que sólo se conserva una base de granito situada junto al cementerio.